En este artículo te paso unos consejos sobre escribir bien dirigido a bloggers profesionales, es decir, para los que se han tomado en serio hacer un blog duradero.
Y es que la base de un blog con futuro es una correcta escritura y buenos contenidos.
Pero, ¿qué se entiende por correcta escritura?
Existen discrepancias y diferencias de opiniones para llegar a un punto de acuerdo.
Y es que cada cual tiene sus gustos y preferencias.
Escribir para una web comercial difiere al estilo de otras categorías de contenidos.
Tampoco es lo mismo escribir en un blog que redactar una página de ventas o una campaña de email marketing.
Cada categoría tiene su intríngulis y su finalidad.
Opino que lo principal es que se entienda bien lo que escribes, que sea ameno y que enganche hasta el final.
Y lo más importante en marketing es que se cumpla el objetivo marcado ya sea divertir, enseñar, intrigar, informar o persuadir al lector.
7 Consejos sobre Escribir Bien para Bloggers
Desde que escribo en un blog, he leído este consejo innumerables veces y por autores buenos dedicados exclusivamente a la escritura.
Tanto si quieres dedicarte a escribir novelas como a redactar contenidos web, debes escribir a menudo.
Ya habrás oído que para ser bueno en algo hay que practicarlo.
Aunque también confieso que mi secreto es desconectar cada cierto tiempo durante unos días, o al menos un día.
De esta manera, cuando retomo la actividad escribo mejor y lo que aprendí compruebo que lo llevo integrado como algo innato.
Pero lo esencial es escribir a menudo.
2) Lee a Otros
Leer va bien porque te abre la mente y coges ideas que te servirán como fuente creativa en el futuro.
Desde un punto de vista profesional, fíjate que mientras leas vayas analizando detenidamente el estilo, estructura de las frases, tono y voz, pero a condición que lo pongas en práctica después. Sino no te habrá servido de nada.
¿Más razones para leer a otros?
Cuando lees a otros autores, tus habilidades para rehacer escritos pasados en nuevas formas de contenidos aumentarán.
Justo hace poco he estrenado esta web. Lo primero que estoy haciendo es rehacer posts de mi antigua web en otros de nuevos mucho más interesantes. Y está claro que tanto la redacción como el hilo conductor los he mejorado.
Más aún, unos cuantos posts antiguos los he convertido en ebooks y otros en un mini curso.
Esta flexibilidad en crear nuevos productos es en gran parte por haber leído a otros autores en diversos formatos. Es entonces cuando aparecen nuevas posibilidades en frente de ti, lanzándote fácilmente a por ellas.
3) Busca Inspiración
Está claro que si conoces el tema y además te pagan por escribir sobre ello, lo haces con ganas.
Cuando sea posible elije escribir sobre lo que te inspire o el lector puede acabar aburrido como tú porque esto se transmite.
Lleva siempre encima una libreta o un aparato electrónico, tipo smartphone o tableta, donde apuntar las ideas que se te vayan ocurriendo.
Aire fresco, descanso, nuevos paisajes, practicar un deporte al aire libre o escuchar música son actividades que alimentan la inspiración.
Dependerá de tu presupuesto pero salir al extranjero es buenísimo. El cambio pronunciado de escenario estimula el proceso cognitivo que forma la base de nuestro pensamiento creativo.
4) Escribe en un Ambiente Propicio
Trabajar desde mi casa me gusta por dos razones.
Una, me organizo a mi manera.
Dos, tengo una habitación grande que utilizo como despacho, ambientada y diseñada de una forma que me hace sentir cómoda.
Creo que es ideal para trabajar a gusto, un lugar tranquilo donde entre luz exterior, amueblado con estanterías y cajones donde organizar bien tus cosas.
Otros detalles son una o más plantas. El verde anima la vista y fomenta la creatividad. Y es agradable contar con un trozo de naturaleza cerca de ti.
Si trabajas desde casa con niños pequeños, intenta adaptarte a sus horarios. Escribe cuando estén dormidos o jugando.
O igual te va bien el ruido. Conozco a una amiga que le encanta ir al coffee shop de al lado de su casa con su portátil. Se pasaría allí horas escribiendo. Dice que es donde rinde mejor.
5) Edita, Edita y Edita
Hay bastantes bloggers que se olvidan de editar a conciencia. Para ellos lo esencial es el primer borrador y luego corregir los pequeños detalles como cosa rápida.
Traté en un post anterior las técnicas básicas de edición del post de un blog; allí hacía referencia a un estudio realizado a bloggers, entre los cuales una amplia mayoría reconocía la ventaja de dedicar más de cuatro horas a la elaboración de los posts.
Estoy segura que de estas cuatro horas de dedicación, más de la mitad están dedicadas a la edición.
La primera parte de la preparación de un post va de planificar las secciones con sus títulos y subtítulos, buscar información, recopilar imágenes y redactar lo que va a ser el primer borrador. Esto no toma tanto tiempo.
Una vez hecho esto, el segundo paso es el que toma una gran concentración. Me refiero a la edición.
Ahí hay que limpiar frases sobrantes, acortar otras, cambiar palabras y párrafos de sitio, afinar con palabras fuertes, etc.
El escrito resultante de la primera edición es bastante distinto a lo que era el primer borrador.
Tras la primera edición, a mi al menos me va bien desconectar un día de ese escrito, aunque pueda trabajar en otros.
Después de horas de sueño y pensar en otras cosas, cuando reemprendo el post lo veo todo con mayor claridad.
Bien, después de una segunda edición vendrá una tercera que será el momento de pulir con detalle el post.
Si lo veo necesario, el post terminado se lo paso a un compañero para que me pase sus comentarios. Siempre es interesante conocer un punto de vista distinto al tuyo.
En definitiva, la etapa de edición es tarea ardua.
6) Perfecciona tu Ortografía
Damos por sentado que lo esencial para escribir bien, que es aplicar correctamente las reglas de ortografía, ya lo aprendimos en su día en la escuela.
Pero reconocer nuestras lagunas nos evitaría pasar vergüenza si alguien descubre alguna falta.
Y si tus lagunas son grandes, estudia con detenimiento un buen libro de ortografía.
Para dudas puntuales te recomiendo la web de la Real Academia Española www.rae.es donde podrás realizar consultas a través de su buscador.
Si te paras a pensar, una razón de peso por la que debemos cuidar la ortografía de nuestra web es porque los usuarios que la visiten no nos conocen.
Lo que está expuesto en la web es nuestra tarjeta de visita. Mejor cuidar el conjunto que respaldará nuestra profesionalidad.
7) Domina la Gramática
Dominar la gramática será un punto a tu favor a la hora de conseguir un nuevo cliente.
Con esta finalidad, hay unas cuantas técnicas que tengo siempre presentes. Son estas:
- Cuidar de empezar dos párrafos seguidos con distinto tipo de palabra. Me explico.
Pongamos por ejemplo que un párrafo empieza así: «Dormir una siesta es saludable». Pues la palabra inicial del párrafo siguiente no debería empezar con un verbo.
De esta manera, a parte de cuidar la calidad hacemos que el texto sea ameno.
- Usar palabras fuertes, lo que implica dar con el significado más acertado posible.
Es cuestión de dar en la diana sin necesidad de ningún complemento como un adverbio.
- Utilizar palabras sencillas. El lector asimila mejor las palabras que le son familiares.
Cuidado con palabras técnicas que solo entienden los profesionales del sector. Estas es mejor que las sustituyas por palabras sencillas, y si no se puede, introduce una pequeña explicación tras la palabra técnica.
- Comprobar la fluidez entre párrafos. Que haya continuidad entre un párrafo y el siguiente, hace la lectura fluida. Con saltos bruscos descolocamos al lector. Es como si nos hubiéramos dejado algo en el aire.
Hay palabras que hacen de conectores entre párrafos, resultando en estupendos comodines. Por ejemplo: “Así”, “Luego” o “Mientras”.
Para Acabar
Y para acabar, recuerda que el fin de un escrito es que el lector comprenda lo que queremos comunicar. Así que tendremos que aplicar técnicas para que siga leyendo hasta el final.
Escribir bien implica una dedicación constante. Hay que escribir a menudo, mantener siempre unos estándares de calidad en la escritura, estar aprendiendo siempre y poniendo en práctica lo que se ha asimilado.
¿Te animas? ¿Ya lo haces? ¡Danos otro consejo!