Diseño web
Todos los usuarios que se conectan a la world wide web, aunque sea ocasionalmente, visitan sitios web por medio de direcciones url, por ejemplo, wikipedia.org, google.com o apple.com.
Cada sitio web presenta una estructura visual y una estética que lo caracteriza, así como contenidos dirigidos al objetivo objetivo en cuestión. Esto más una navegación rápida y fluida, componen el diseño distintivo de los sitios web.
Así, un buen diseño web implica tener en cuenta tanto la parte visual como la parte funcional. Este conjunto es de vital importancia en el entorno competitivo actual, tanto para las grandes empresas como para las pequeñas empresas y freelancers.
El diseño web responsivo o responsive (en inglés) es un formato de programación que adapta automáticamente el tamaño de una web a cualquier dispositivo como ordenadores, tabletas y smartphones.
Gracias al diseño web responsivo, los usuarios tienen una mejor experiencia de navegación.
El precio final de un diseño web está en función de la complejidad del sitio web. No es lo mismo crear un comercio electrónico que una web de solo una página, o una web de servicios con tres páginas. Igualmente, hay clientes que quieren funcionalidades específicas como una zona personal para usuarios registrados, o imagínate alguien que quiera una academia de lo que sea. Por eso doy un precio aproximado en mi página de tarifas, la cual puedes consultar en esta misma web, y tras hablar con el cliente, hago un presupuesto final.
Un diseñador web se encarga de realizar el prototipo e interfaz del usuario de la web, seguido del diseño. Luego, una vez publicada la web, realiza pruebas y en su caso, las mejoras oportunas.
En cambio, un desarrollador web domina los lenguajes para crear un sitio web desde cero, básicamente con HTML y CSS.
Luego, un programador web utiliza lenguajes de programación como Javascript, PHP o Phyton más otras aplicaciones de backend que resultan en funcionalidades específicas para las empresas.
El trabajo de diseño es de carácter creativo; el de desarrollo y programación es técnico.
Normalmente, con dos o tres revisiones es suficiente para finalizar el proyecto. Pero el diseño web lo considero finalizado cuando el cliente da su visto bueno de forma definitiva.
El primer paso es intercambiar ideas con el cliente a fin de dejar claro puntos sobre branding, objetivos, preferencias en el diseño, contenidos y expectativas.
A partir de aquí, creo un primer borrador de la web para que el cliente realice los comentarios o modificaciones que crea oportunas. Lo mismo con los siguientes borradores hasta dar por finalizado el proyecto.
Una vez publicada la web, siguen unos días de comprobación de que todo vaya bien, o de mejora técnica del SEO.
Al acabar, hay clientes que realizan un curso de tres horas sobre la administración de WordPress para manejarse bien ellos solos. O si lo prefieren, por un precio módico me encargo yo misma del mantenimiento anual del sitio web.
El plazo de entrega es de quince días de media para sitios web de unas seis páginas.
No. Mi compromiso es dejar el proyecto acabado según lo acordado, y realizar las mejoras que surjan dentro de la misma línea. Es difícil por no decir imposible que se produzca una solicitud de este tipo. Siempre he finalizado los proyectos con la aprobación de mis clientes.
Normalmente son los clientes los que prefieren aportar los contenidos ya que conocen mejor su sector. Pero también se dan casos en lo que los clientes me delegan la redacción de los contenidos. Ambas posibilidades son factibles.
Sí. Si bien los contenidos que redacto son originales, como norma siempre confirmo con mi programa de plagiarismo de que no haya líneas o frases coincidentes por casualidad.
La forma de pago suele ser por transferencia bancaria o bizum, de la siguiente forma: 50% antes de empezar, a la mitad del proyecto un 25% y al finalizar, el 25% restante.